sábado, 6 de enero de 2018

Psicoterapia psicodinámica en la actualidad

Hace unos meses escribí sobre la demonización del psicoanálisis y hoy quiero volver a tocar el tema, sin ánimo de repetirme demasiado (aunque me temo que tal vez lo haga, en parte), motivado por el hecho de haberme encontrado de forma fortuita y con apenas unos pocos días de diferencia con dos informaciones con respecto a esta materia.

La primera es la siguiente: la Asociación Americana de Psicología compartió hace unos días, en su cuenta de Twitter, un artículo de la revista “Monitor on Psychology” titulado “Not your grandfather`s psychoanalysis” (que en español viene a dice algo así como “No es el mismo psicoanálisis que el de los tiempos de tu abuelo”). En este escrito se resume bastante bien el mensaje que quise transmitir en la citada entrada de mi blog. Cabe destacar algunos puntos importantes tratados en el artículo:

  • El psicoanálisis ha ido evolucionando y cambiando, al igual que ha sucedido con el resto de terapias y de otras disciplinas; no es el mismo que utilizaba Freud, de la misma manera que la Terapia Cognitiva no es la misma que describían autores de las décadas de los 70 y 80 del siglo XX.
  • Los clínicos e investigadores adscritos a corrientes del psicoanálisis se han abierto más a la investigación, siguiendo los estándares utilizados para comprobar la eficacia de los tratamientos psicológicos, lo que ha supuesto que la evidencia a favor de la psicoterapia psicodinámica haya ido en aumento.
  • Estudios realizados por autores de prestigio internacional, como Peter Fonagy, han arrojado resultados positivos para la terapia psicoanalítica, mostrando, por ejemplo, su eficacia a la hora de tratar casos de depresión, y obteniendo incluso mejores resultados a largo plazo que la Terapia Cognitivo-Conductual (la referencia se puede encontrar en el artículo). Por si alguien duda de que este modelo de intervención pueda ser compatible con la búsqueda de los “tratamientos con validez empírica”, aquí tenemos una frase del propio Fonagy bastante esclarecedora, recogida en el artículo: “Para mi lo importante es encontrar las terapias psicológicas que funcionen mejor para grupos particulares de pacientes y, para encontrar esos tratamientos, creo que debemos tener una comprensión mejor de la naturaleza de los problemas con los que la gente viene a nosotros”. Una afirmación que encaja perfectamente con la definición de lo que es la psicología basada en la evidencia. 

    Peter Fonagy.
  • Como se relata en el artículo, algunos piensan que el encuadre clásico del psicoanálisis se mantiene: tratamientos que duran años, con 4 o 5 sesiones semanales, usando el icónico diván. Nada más lejos de la realidad. Si bien es cierto que algunos psicoanalistas puede que sigan trabajando de esta forma, lo cierto es que hoy en día es habitual que el proceso terapéutico se base en una frecuencia de una sesión semanal y que la duración total de la terapia pueda ser tanto de unas pocas semanas o meses como de años; algo similar a lo observado en otro tipo de enfoques de psicoterapia. Por ejemplo, las sesiones semanales son habituales en la Terapia Cognitivo-Conductual y algunos protocolos de tratamiento tienen una duración de 1 o 2 años (véase el ejemplo de la Terapia Dialéctica Conductual, aplicada a casos de trastorno límite de la personalidad y considerada un tratamiento eficaz para este trastorno).
  • El enfoque se centra en ayudar a los pacientes a comprenderse de una forma más profunda, de manera que puedan identificar los factores que subyacen a sus dificultades y dejen de repetir los mismos patrones”, se dice en otro párrafo. De nuevo, una declaración nada cercana a corrientes pseudocientíficas y que tiene mucho en común con lo que se hace en otros modelos reconocidos. ¿No es una parte fundamental de la Terapia Cognitvo-Conductual que el paciente comprenda cómo sus conductas o sus pensamientos están manteniendo el problema para que así pueda elegir o aprender a comportarse de una forma diferente y más eficaz?

Con respecto a la segunda referencia con la que me encontré durante estas vacaciones navideñas, en el recién finalizado año 2017 la revista JAMA Psychiatry publicó un artículo en el que se revisaba de forma sistemática la evidencia sobre la eficacia de diferentes psicoterapias en el abordaje del trastorno límite de la personalidad. Se halló que tanto la Terapia Dialéctica Conductual como la Psicoterapia Psicodinámica mostraron ser eficaces, si bien es cierto que algunos resultados pueden estar sesgados. Ello no es un obstáculo para mostrar dos cosas: que la psicoterapia psicodinámica es susceptible de ser investigada siguiendo los mismos criterios que otros tipos de tratamiento y que ha obtenido resultados favorables. Por supuesto, estos resultados estarán abiertos a su revisión y replicación (o no replicación), como sucede de forma habitual en la investigación científica.

Los clínicos, investigadores, estudiantes y divulgadores en general deberían tener en cuenta este tipo de información antes de lanzarse a descalificar una orientación psicoterapéutica y encasillarla como “pseudociencia”. Desde luego que debemos denunciar aquellas prácticas que no se ajustan a lo que sabemos sobre las necesidades de las personas y la eficacia de la psicoterapia, pero una sobregeneralización guiada por prejuicios personales o culturales y que ignora una parte sustancial de la evidencia disponible puede ser tan dañina como un tratamiento psicológico de dudosa validez. 


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PD para posibles lectores recelosos: no trabajo desde una orientación psicoanalítica ni psicodinámica, por lo que puedo decir que un conflicto de intereses de este tipo queda descartado en este artículo.

4 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo, Alberto. Y recomiendo al respecto el libro La Conexión Emocional de Ramón Riera (tanto para profesionales como para público general interesado). Gracias por tu blog (paso poco por él xo lo q leo me gusta y me aporta).

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    1. Gracias por tu comentario, Mercedes. Me alegra mucho saber que este blog puede aportarte algo.

      Un saludo.

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  2. He escrito varias veces, pero no se si se publica,

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